Trabajar desde casa puede ser una experiencia gratificante, pero también viene con sus propios desafíos, especialmente cuando se tiene una mascota. Los animales, al igual que los humanos, requieren atención, cariño y tiempo. Sin embargo, encontrar un equilibrio entre cumplir con las responsabilidades laborales y cuidar de tu mascota puede parecer complicado. Por tanto, la clave para gestionar tanto el trabajo como el cuidado de una mascota es establecer horarios que permitan atender ambas responsabilidades sin generar estrés ni comprometer la productividad.
En este artículo, exploraremos estrategias útiles para estructurar el día, establecer rutinas y aprovechar al máximo el tiempo, para que se puedan cumplir las obligaciones laborales sin descuidar a tu mascota. De esta forma, se logra incentivar un programa de bienestar laboral, con el objetivo de reducir la ansiedad, mejorar el equilibrio mente-cuerpo, y, desarrollar un programa de trabajo óptimo.
Crear una rutina diaria para ti y tu mascota
Las mascotas, al igual que las personas, se benefician enormemente de las rutinas. Al establecer un horario claro y predecible para actividades como paseos, alimentación y juegos, no solo les estás proporcionando estabilidad y seguridad, sino que también estás ayudando a organizar mejor el propio tiempo. Al planificar estos momentos, se puede programar el trabajo en torno a las necesidades de la mascota, asegurando que se puedan cumplir las responsabilidades sin interrupciones.
Por ejemplo, se puede comenzar el día con un paseo matutino para perros o dedicar unos minutos a jugar con el gato antes de sentarse a trabajar. Esto no solo ayuda a relajarse y empezar la jornada con energía, sino que también asegura que la mascota reciba la atención que necesita. Si la mascota está bien atendida y tiene una rutina predecible, es menos probable que interrumpa durante las horas de trabajo más productivas. Además, se pueden planificar descansos regulares, y, en lugar de hacer una pausa sin sentido, aprovechar esos momentos para darle a la mascota un poco de tiempo de calidad.
Establecer límites claros entre trabajo y tiempo para la mascota
Al trabajar desde casa, es fácil que las líneas entre el tiempo de trabajo y el tiempo personal se difuminen. Esto también se aplica a la interacción con las mascotas, ya que, si bien es maravilloso tener a un perro o gato cerca, también es importante establecer límites claros para que no interfieran en los momentos de concentración. Dejar que tu mascota esté contigo en el área de trabajo puede ser relajante, pero debe haber reglas sobre cuándo puede interactuar contigo y cuándo debe mantenerse en calma.
Una forma efectiva de hacerlo es crear un espacio separado donde la mascota pueda relajarse durante las horas más ocupadas. Un lugar cómodo con juguetes, cama y agua puede ayudar a mantener a la mascota ocupada mientras se trabaja. Además, si hay una videollamada o en una tarea que requiera concentración, se puede entrenar a la mascota para que no interrumpa en esos momentos específicos.
Aprovechar la tecnología para simplificar el cuidado de tu mascota
En la actualidad, la tecnología ha hecho que el cuidado de las mascotas sea mucho más manejable, incluso si se tiene un día laboral ocupado. Existen múltiples dispositivos y aplicaciones que pueden ayudar a organizar el cuidado de la mascota, lo que facilita la combinación de la vida laboral con el bienestar de la mascota.
Dispositivos como las cámaras interactivas para mascotas permiten observar a la mascota durante el día, incluso si está en otra habitación. Algunas cámaras también permiten hablarles o incluso repartir golosinas de manera remota, lo que puede calmar a una mascota ansiosa sin que se tenga que dejar el escritorio. Además, los dispensadores automáticos de comida y fuentes de agua aseguran que la mascota siempre tenga acceso a sus necesidades básicas sin que se tenga que interrumpir el trabajo.
También hay aplicaciones que pueden ayudarte a mantener un horario organizado, recordando cuándo es el momento de pasear al perro, alimentarlo o jugar con el gato. Estas herramientas permiten mantener el control sobre el cuidado de la mascota sin que interfiera con la productividad en el trabajo. De esta forma, es posible asegurarse de que el animal esté bien atendido, sin descuidar las responsabilidades laborales.
